En este proyecto había una premisa esencial, buscar la luz y el espacio, pero sin hacer algo “soso”, nada de todo blanco. Buscábamos ese toque natural que aporta el acabado que se eligió y la frescura y claridad que aporta el blanco.
Había que pasar de una habitación de bebé a algo mucho más funcional y con personalidad propia. La estancia no era muy grande, pero debía contener todos los elementos necesarios para el correcto funcionamiento del espacio y la maximización de cada centímetro de la misma.
Vamos a ir viendo el Antes, el Proyecto y el resultado final.
Las necesidades van creciendo según van creciendo nuestros hijos y era imperativo poder contar con un buen armario, con amplio espacio de almacenaje, una cama cómoda y funcional que tuviera una segunda cama para las visitas de amigos o familiares y, por supuesto, una buena zona de estudio.
Se buscaba darle un aire nórdico, con esa calidez que aporta el toque de madera, un espacio relajado donde el niño pueda disfrutar, aprender y desarrollarse, saliéndonos un poco de las maderas convencionales que están en prácticamente todos los catálogos de habitaciones juveniles.
Se comenzó a amueblar con un buen armario de rincón el cual cubría las necesidades de almacenaje del chico. Seguidamente, una cama nido de 90x190cm, con una segunda cama debajo. Encima de la cama y como apoyo para guardar libros, etc… se colocó una estantería colgada. Un arcón deslizante nos sirve de cabecero para la cama y nos proporciona una perfecta superficie de apoyo para la mesa que, rematada con una cajonera, ocupa todo el ancho de la habitación aprovechando así al máximo el espacio y proporcionando una zona de estudio amplia y cómoda bañada con la luz natural, tan importante, que entra de la ventana.
Con esta distribución conseguimos que los muebles no agobien el espacio y dejamos una habitación limpia y ordenada, valores que, seguro, le servirán a su ocupante más adelante en su día a día. Por supuesto se cerró el armario a techo para evitar la formación y acumulación de polvo lo cual aporta un plus a la hora de mantener la limpieza de la habitación.
Creemos que el resultado quedó a la altura de las expectativas y conforma una estancia muy agradable y de tonos que invitan a la relajación, al estudio y, como no, al disfrute de la estancia.
¡Disfruta de tu habitación por muchos años, Xavier!!!
